DÍAS NEFASTOS...
Es lo contrario de un "día fasto", que como antiguamente se denominaba una jornada festiva o de ocio, en la que podían realizarse actividades voluntarias y de aficiones. El término venía del latín "fas", dichoso, de buena suerte, cuyo antónimo, "nefas", era la definición de lo maldito, lo desagradable o molesto... Desde el Medievo hasta el siglo pasado era frecuente decir "por fas o por nefas" cuando se describía una postura reticente por parte de alguien o lo inevitable de una situación. En esta ocasión, ocurría lo que tenía que ocurrir se quisiera evitar o no.
Este término se adoptó para definir jornadas u ocasiones especialmente dichosas o lamentables. Contrario al dia "fasto" existía el día "nefasto", que auguraba malas influencias o mala suerte o desgracias en esa jornada. Plutarco cuenta que Julio César fue rechazado por la pitonisa de Delfos, a quien acudió a pedirle un oráculo, por hacerlo en un día "nefasto", en opinión de la sacerdotisa. En estos días negativos se recomendaba no emprender actividades privadas importantes ni empresas arriesgadas y generalmente cesaban las actividades públicas.
Hoy ha sobrevivido el término "nefasto" para definir los días negativos o desgraciados. No así "fasto", que se ha sustituído por alegre, suertudo, divertido, positivo, etc...
5 comentarios:
Me ha gustado mucho esta entrada.
Un beso
Los latinos que dejaron su huella por todos los lados. Somos sus hijos queramos o no.
Antorelo, gracias. Ya sabes que busco muchas veces el porqué de algunas palabras o frases. Un beso.
Trecce, nunca mejor dicho. No podemos negar que somos de origen latino y, aún antes, helénico. Casi todas nuestras palabras tienen raíz latina. Algunas menos la tienen griega y el resto son modismos o adaptaciones del francés generalmente. UN beso y gracias por la visita.
¿O sea Bea, en mi propio blog?.
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